Roberto López, usuario de InspirAIR® Home SC

“Estamos encantandos porque la casa ha pasado de no ser
habitable a serlo”

Las casas son, junto con el trabajo, los lugares donde pasamos más tiempo a lo largo de nuestra vida. De hecho, estamos el 90% del tiempo en interiores (más de 21 horas al día). Resulta obvio que cuanto más saludables son las condiciones en los espacios donde pasamos tantas horas, mejor será nuestra salud.

Lo que mucha gente desconoce es que en los espacios interiores se acumula una contaminación que puede llegar a ser hasta 8 veces superior a la contaminación exterior. Vivir en casas húmedas y con moho aumenta nuestro riesgo de asma en un 40% y nos deja vulnerables a desarrollar otras enfermedades respiratorias.

Los índices de humedad de la casa superaban el 85%

Es el caso de nuestro cliente Roberto López. Vive con su familia en Tres Cantos en una casa construida en 1960, con un problema común en construcciones más antiguas: no cuenta con forjado sanitario (una cámara que aísla la construcción del suelo). Por lo tanto, sube la humedad constantemente desde el suelo.

Lo que agravó la situación fue una reforma donde se instalaron cerramientos de carpintería con ventanas Climalit. Al mejorar el aislamiento, la casa se volvió estanca y aumentó aún más el problema de la humedad. De hecho, llegó a superar el 85% de humedad relativa en todas las estancias.

El problema fue la falta de ventilación

Roberto empezó a investigar el problema y se puso en contacto con empresas que ofrecían soluciones a la humedad en el ambiente, hasta encontrar a Aldes que le recomendó la instalación de un sistema de ventilación mecánica controlada.

“Los muebles se llenaban de moho en la parte trasera, olía a humedad la casa, o sea, era un problema importante. Y estuvimos viendo opciones de empresas de humedades, pero nos dimos cuenta de que el problema no era tanto de humedad en sí, sino más bien de ventilación de la vivienda, y cuando nos pusimos en contacto con Aldes, nos dieron la solución”.

La solución:

La central de ventilación de doble flujo y purificación de aire puso fin a la humedad y el moho

Ventilación y purificación del aire

Sin tener que abrir las ventanas, este sistema extrae constantemente el aire del interior del hogar, e introduce a través de unos filtros el aire limpio del exterior.

El aire exterior entrante se filtra para retener el polen, partículas finas y bacterias, mientras el aire interior se extrae con el fin de liberarlo del CO2, de la humedad y los compuestos orgánicos volátiles (liberados por la quema de combustibles como el gas natural, o provenientes de los disolventes, pinturas y otros productos empleados y almacenados en la casa).

Recuperación del calor

Los conductos de entrada y salida de aire de este sistema “de doble flujo” se cruzan, y en su encuentro intercambian el calor que contienen.

De esa manera, en invierno, el aire frío que entra en la vivienda, recibe entorno al 80% del calor que transporta el aire expulsado, por lo tanto el aire que entra en casa ya está caliente y apenas perdemos energía. Lo mismo ocurre en verano, pero a la inversa: El aire caliente del exterior es enfriado por el aire interior expulsado, de manera que el 80% de la energía de climatización se recupera.

Desde la instalación de este sistema, en la casa de Roberto ya no hay condensación por humedades. “Aunque había que hacer obra, sabíamos que era la solución necesaria para resolver el problema y desde Aldes nos dieron la seguridad y confianza para llevarla a cabo”.

La mejora de la calidad del aire es inmediata e influye en la salud de la familia

La calidad del aire mejora inmediatamente tras la instalación y también la salud de toda la familia que respira el aire purificado. “Mi mujer es bastante alérgica, antes no paraba de toser por las noches y desde que tenemos este aparato ya no le pasa”. La central de Aldes soluciona los dos problemas que afectan a la calidad del aire interior: elimina humedades y mantiene la calidad del aire interior gracias a la filtración.

La diferencia:

“La principal diferencia que noto es la de entrar por la puerta y no oler humedad, la casa ha pasado de no ser habitable a serlo”.

Otra de las ventajas del sistema está en la reducción del ruido. “La contaminación acústica también era importante para nosotros porque vivimos en la naturaleza, pero hay una carretera al lado y el hecho de no tener que abrir las ventanas nos evita esa molestia del ruido”.

Los sistemas de ventilación están indicados para cualquier persona que quiera disponer de una correcta ventilación y calidad del aire que respira dentro de su hogar. “Yo le recomendaría estos aparatos a todos los que tuviesen un problema como el mío, pero también a cualquier persona, porque no somos conscientes de la importancia de esto, pero cuando lo pruebas compensa y la salud lo nota”.